El dichoso miedo al dentista
Es bien sabido que el miedo al dentista es en ocasiones, de los peores miedos que enfrentan nuestros hijos . El territorio de la boca es un espacio íntimo y solo cuando duele nos vemos obligados a visitarlos. Desde que existen las anestesias y técnicas modernas , ese miedo tiene que ir desapareciendo.
Se sabe también que acudir con frecuencia y por prevención, antes de que se produzcan patologías como la caries o las enfermedades de las encías puede evitarnos problemas y tratamientos costosos.
Los dientes, cuidados y vigilados continuamente, deben durar toda la vida. Solo en casos de gran destrucción o infecciones severas de encías o el hueso que los rodea , se deben extraer , por ello cuanto antes perdamos el miedo, antes pondremos los medios para disfrutar de una boca sana y funcional.
Consejos como cepillarse tres veces al día , pasar el hilo dental, al menos una y acudir a revisión cada seis meses seguro que no resultan extraños.